LA TRAVES�A DE UN MUSEO MAR�TIMO OCTOGENARIO. LA VIDA DEL MUSEU MAR�TIM DE BARCELONA NO HA SIDO F�CIL, PERO POR FIN HA ALCANZADO SU ESPLENDOR

EL MERCANTIL, Miriam Vázquez, Barcelona 23 de enero de 2021

SANTA CRUZ DE TENERIFE, MI PUERTO, Redacción, 15 de marzo de 2021

Siguiendo con nuestra idea de concienciar a las personas responsables a nivel municipal, insular, regional y portuario de Canarias, para que lleven a cabo la creación del MUSEO MARÍTIMO CANARIO y/o diferentes AULAS DEL MAR, este mes como recordatorio, Santa Cruz de Tenerife, mi Puerto, hace referencia a un macro museo, como es el MUSEU MARÍTIM DE BARCELONA, del que adjuntamos 35 fotografías, muchas de ellas, de una de nuestras visitas a dicho museo, el pasado 29 de abril de 2016. La Información obtenida, la hemos rescatado, aprovechando un artículo de “EL MERCANTIL” y firmado por Dª. Miriam Vázquez, con el título, “LA TRAVESÍA DE UN MUSEO MARÍTIMO OCTOGENARIO”. Al mismo le hemos añadido, información obtenida de la propia página web del museo, de la Fundación y de varios, con nuestra modesta redacción que espero guste, a mí me desconsuela una vez más.

INTRODUCCIÓN: El MUSEU MARÍTIM DE BARCELONA (MMB), es un espacio para la interpretación y difusión de la cultura marítima catalana de forma innovadora, participativa y próxima a la sociedad y al territorio, mediante la investigación, conservación y salvaguarda del patrimonio. Es su deseo ser una institución de referencia de la cultura marítima mediterránea, abierta y accesible a toda la sociedad, y cooperativa con las personas y las organizaciones. El MUSEU MARÍTIM DE BARCELONA (MMB) tiene la voluntad de destacar en la gestión patrimonial, la creación de conocimiento y la educación, con la misión de actuar como impulsor del progreso social y territorial de su entorno, desde la óptica de la relación de Cataluña y su gente con el mar, que es lo que diferencia al MUSEU MARÍTIM DE BARCELONA (MMB) de otros museos de temática marítima.

Creación y difusión del conocimiento: La creación de conocimiento es uno de los valores que tiene que impregnar de forma permanente toda la organización, así como la transmisión y difusión a toda la sociedad de este conocimiento. Participación: Entendida como un diálogo permanente entre el Museo y los visitantes para estimular la curiosidad y el sentido crítico. Abierto a la sociedad: El MUSEU MARÍTIM DE BARCELONA (MMB) tiene que estar vinculado a la realidad social y contribuir a su mejora, haciéndolo atractivo y acogedor para todo tipo de público, en una sociedad cada vez más diversa y multicultural. Innovación: Entendida como la búsqueda permanente de nuevos caminos y procedimientos en todos los ámbitos y actuaciones.

Excelencia: Entendida como una actitud de mejora continuada en todos los ámbitos, buscando alcanzar los máximos niveles de calidad posible en la prestación de sus servicios y en la ejecución de sus actividades. Sostenibilidad: Los principios de sostenibilidad tienen que estar presentes tanto en su discurso como en la práctica diaria, contribuyendo al cambio de mentalidad y a buenas prácticas en todos los ámbitos. Accesibilidad universal: Ser un Museo accesible al conocimiento para un público diverso. Eficiencia: Como institución de interés público, el principio de máxima eficiencia en el uso de los recursos asignados tiene que estar presente en todos los procesos y actuaciones

El CONSORCI DE LES DRASSANES REIALS i MUSEU MARÍTIM DE BARCELONA se creó en 1993. Se trata de un ente público de carácter local adscrito al grupo Diputación de Barcelona, formado por el Ayuntamiento de Barcelona, que es el propietario del edificio, por la Diputación de Barcelona, que es la titular del Museo, y por la Autoridad Portuaria de Barcelona. Tiene por objeto la conservación y la rehabilitación del conjunto patrimonial del inmueble donde se encuentran las DRASSANES REIALS, así como la prestación de los servicios vinculados al Museo. El precedente histórico de este Consorcio se encuentra en la ‘Concordia’ que en 1378 firmaron el rey Pere IV, el Consejo de Ciento y la Diputación del General. Aquel acuerdo pretendía llevar a cabo de una manera eficaz la construcción de los Astilleros Reales. Fue el espíritu de colaboración entre instituciones lo que permitió levantar esta joya de estilo gótico civil catalán.

La FUNDACIÓN de apoyo al Museu Marítim i Drassanes Reials de Barcelona se constituyó en el año 2006 con el fin de abrir el Museo a la participación y colaboración del mundo empresarial y de la sociedad civil organizada, así como de otros entes públicos. Uno de sus retos principales es establecer vínculos de complicidad con los agentes dinamizadores del Puerto de Barcelona, a fin de que el MUSEU MARÍTIM, les DRASSANES REIALS y la flota del Museo, encabezada por el pailebote SANTA EULÀLIA, se conviertan en el referente histórico y cultural más emblemático del Puerto de Barcelona. Su finalidad es promocionar, fomentar, divulgar, prestigiar, defender y ampliar las actuaciones y el patrimonio del MUSEU MARÍTIM DE BARCELONA y contribuir a la conservación del conjunto de edificaciones de interés cultural que forman les DRASSANES REIALS de Barcelona.

La Fundación quiere contribuir a difundir el conocimiento nacional e internacional del MUSEU MARÍTIM y de les DRASSANES REIALS, así como a reforzar su presencia en la sociedad. Actualmente la componen 31 entidades, de las cuales 6 son instituciones: Diputación de Barcelona, Ayuntamiento de Barcelona, Puerto de Barcelona, Turismo de Barcelona, Generalitat de Cataluña y Puertos del Estado. Los 25 restantes son empresas del sector portuario, que constituyen una excelente representación de la actividad económica del sector en Barcelona. El apoyo incondicional de los Patrones a través de la Fundación facilita las actuaciones, tanto en el ámbito de la investigación como en el de la difusión, que aporten prestigio a la misma Fundación y al Museo y que pongan al alcance de las personas la cultura marítima de nuestro entorno.

Fue herencia directa del MUSEU MARÍTIM DE CATALUNYA, un proyecto impulsado desde la Generalitat que nació en plena Guerra Civil, pero que nunca llegó a abrir sus puertas por culpa de la contienda. Eso sí, sirvió para asentar los pilares del futuro museo, que se inauguró en enero de 1941 en presencia de las máximas autoridades de la marina, la política y la vida cultural y religiosa del franquismo. Daba así comienzo, en un periodo convulso y precario, el MUSEU MARÍTIM DE BARCELONA (MMB), albergado en las DRASSANES REIALS (Atarazanas Reales), uno de los astilleros medievales más grandes del mundo que durante años se vio forzado a servir a finalidades militares. Tras numerosas inversiones y el trabajo ingente de muchos profesionales durante ocho décadas, poco se parece al actual aquel escuálido y malherido museo y el edificio que lo acoge.

La apertura estaba prevista para octubre de 1939, pocos meses después de que la entrada de las tropas franquistas en Barcelona pusiera fin al proyecto del MUSEU MARÍTIM DE CATALUNYA. En aquel momento, era imposible disponer de un equipamiento en condiciones por las severas restricciones económicas y con plazos tan exiguos para presentar el museo en sociedad. Sin embargo, las motivaciones políticas llevaron a fechar su inauguración a principios de 1941. En plena postguerra, el resultado fue mucho más modesto de lo concebido inicialmente y, aunque se recuperaron más de 1.500 objetos, con las prisas se quedaron algunos aspectos por resolver como una rotulación adecuada de las piezas.

Inauguración del Museo Marítimo de Barcelona, 18 de enero de 1941 / MMB

Desde entonces se acogió a visitantes cada día por la mañana excepto los lunes, en un horario que se fue ampliando de forma progresiva. El precio de la entrada se estableció en una peseta y, el primer día de pago, el museo recibió una afluencia de 613 usuarios. La novedad que comportaba este patrimonio poco conocido y la oportunidad de acceder al edificio de las DRASSANES REIALS fueron un factor clave, aunque el conjunto arquitectónico se encontraba muy deteriorado por la Guerra Civil y necesitaba restaurar la mayoría de sus naves, muchas de ellas a la intemperie y sin techumbre.

La afluencia fue disminuyendo con el paso de los meses. Los primeros años estuvieron marcados por la precariedad que imponía la falta de recursos económicos. Poco a poco, los otrora astilleros iniciaron su proceso de restauración y, con ella, llegó la ampliación del espacio expositivo. Sin embargo, durante la rehabilitación, surgieron problemas estructurales, con deficiencias provocadas por la humedad, el frío o la incidencia del sol, y que afectaba directamente a la conservación de las colecciones expuestas. También se le añadirían sucesos imprevisibles, como las inundaciones provocadas por las lluvias de octubre de 1951 o daños en las vigas provocados por termitas. Además, la ausencia de vigilancia nocturna, sumada a las grandes dimensiones del edificio, convirtieron los astilleros reconvertidos a museo marítimo en presa fácil y apetecible para los ladrones.

A pesar de todas las penurias, el museo resistió. En 1957, llegó al recinto una réplica a escala real del ‘SANTA MARÍA’, la embarcación con la que Colón navegó a América. A partir de aquí, el museo incrementó notablemente sus colecciones mediante donaciones, adquisiciones y producciones del taller en las dos décadas posteriores. También aumentó las superficies de exposición y celebró actos públicos y exposiciones en su interior. En este periodo expansivo de la propuesta museística, fue clave la figura de D. José Martínez-Hidalgo, que durante 25 años dirigió el museo. Su idea era convertirlo en un centro de primer orden dedicado a la cultura marítima y, para lograrlo, viajó al extranjero para captar las tendencias de otros recintos. El Sr. Martínez-Hidalgo también expresó, cuando tomó posesión de su cargo, su voluntad de concebirlo como un centro cultural con finalidades pedagógicas e informativas, además de patrimoniales.

En esos años, se propuso la elaboración del primer catálogo del museo y la construcción de una réplica de la ‘GALERA REAL’ de Juan de Austria en la Batalla de Lepanto. Esta pieza, cuya construcción se realizó en la década de los 60, reavivó las tareas del taller de restauración del museo. A pesar del deslumbrante astillero que acoge el MUSEU MARÍTIM DE BARCELONA (MMB), el edificio no fue declarado bien cultural de interés nacional hasta 1976, en plena Transición Española. Esta época también ha dejado en las hemerotecas numerosos rastros de las disputas entre las dos instituciones encargadas de gestionar el espacio: el Ajuntament de Barcelona, propietario del edificio, y la Diputació de Barcelona, propietaria del museo. Para superar la pugna y pacificar las relaciones entre ambas administraciones, fue esencial la firma de un convenio en los años ochenta para la constitución definitiva de un patronato del museo.

EL MUSEO HA RESISTIDO TODO TIPO DE DESVENTURAS, DESDE PENURIAS Y TERMITAS HASTA DISPUTAS ENTRE INSTITUCIONES: A finales de esa misma década, el MUSEU MARÍTIM DE BARCELONA (MMB) inició uno de sus procesos más ambiciosos: dedicar la totalidad del recinto a usos museísticos. El proyecto de cambio y reordenación del complejo culminó en 1993, con la creación del CONSORCI DE LES DRASSANES, que agrupó a tres instituciones estrechamente relacionadas con el museo: la Diputació, el Ajuntament y la Autoridad Portuaria de Barcelona. En los años posteriores, se reforzó la apuesta por la restauración del conjunto arquitectónico y la elaboración de un nuevo discurso y museografía según las demandas de los visitantes. A esto se le añadió, en 1997, la adquisición del pailebote ‘SANTA EULALIA’, uno de los últimos veleros dedicados al transporte de mercancías en el Mediterráneo.

La entrada del museo en el nuevo milenio sirvió para fortalecer la mayoría de proyectos iniciados en 1993, además de proseguir los trabajos de rehabilitación del edificio. De hecho, en el periodo de 2010 a 2013, las obras de restauración que llevaba a cabo sacaron a la luz una necrópolis romana en el subsuelo, diversos hallazgos de la Baja Edad Media y también de la época moderna. Después de 80 años, los participantes de su inauguración en 1941 tendrían serias dificultades para reconocer el edificio y el espacio. Las colecciones se han ampliado, las inversiones se han diversificado, la tecnología ha cambiado y el lenguaje expositivo se ha acercado al público de hoy. Lo que un día empezó en un reducido espacio de las DRASSANES REIALS se ha convertido en un recinto polivalente y la referencia marítima de la ciudad tras la finalización de su proyecto museístico en 2019.

FONDOS Y COLECCIONES DEL MUSEO: El MUSEU MARÍTIM DE BARCELONA (MMB) también se ha consolidado durante todos estos años como un referente en el ámbito de la documentación y de la investigación. Dispone de un extenso archivo histórico con volúmenes editados antes del 1900, entre los que se incluyen tratados de construcción naval o de navegación. El servicio busca organizar y custodiar la documentación para facilitar su consulta, en un fondo que aúna numerosas manifestaciones de la cultura marítima y su patrimonio. Asimismo, cuenta en su archivo con NUMEROSAS COLECCIONES FOTOGRÁFICAS y de publicaciones tanto antiguas como actuales. Para poner todo este acervo a disposición del público, permite su consulta a través del servicio de biblioteca, lanza colecciones y muestras que se pueden consultar online y realiza tareas de conservación preventiva y restauración, entre muchas otras actividades e iniciativas divulgativas.

CINCO SÍMBOLOS EN LA HISTORIA DEL MUSEU MARÍTIM DE BARCELONA:

MAUSOLEO ROMANO: Un gran tesoro arqueológico encontrado en el subsuelo de la “Ciutat Vella”, es el MAUSOLEO ROMANO, de planta rectangular que durante siglos permaneció sepultado bajo las DRASSANES REIALS del MUSEU MARÍTIM, delante del puerto, entre la Rambla y el inicio del Paralel. Es el primer sepulcro magnífico y suntuoso del siglo II encontrado en Barcelona, con una rica variedad tipológica de rituales funerarios asociados a inhumaciones y a incineraciones. En la necrópolis se han encontrado ajuares, urnas y vasijas por arqueólogos que dependientes de la Generalitat y del Museu de Historia de la Ciutat. D. Josep Manuel Rueda, subdirector del departamento de Patrimoni Arquitectònic, Arqueològic i Paleontològic de la Conselleria de Cultura indicó en su día: «Se ha encontrado la delimitación de los antiguos astilleros medievales. Ahora sabemos con exactitud dónde estaba la puerta de Barcelona».

DRASSANES REIALS: El lugar escogido para contar con un Museo de la Historia ligada al mar de Barcelona, fueron las REIALS DRASSANES, las antiguas atarazanas reales, testimonio del pasado marinero de la ciudad. En sus imponentes naves se construyeron galeras y parte de la flota de la antigua Corona de Aragón, se repararon barcos de guerra y sirvió como almacén de materiales, utensilios y pertrechos de marineros. Toda una historia y unos usos vinculados al mar de los cuales ahora es testimonio. Las Drassanes se construyeron adosadas a las segundas murallas medievales de la ciudad, como si de una gran fortificación militar se tratara, y todavía se conservan restos de los baluartes en la plaza de Santa Madrona y una de las puertas de acceso, así como parte de lienzo de las antiguas murallas de la ciudad. Las espléndidas naves, limpias de columnas, de altos techos y arcadas gigantescas, que antes acogían la construcción de barcos de guerra, son hoy un espacio dedicado a la cultura marítima de la ciudad.

SANTA EULALIA: Goleta de tres palos botada en la playa de Torrevieja en el año 1918 es la SANTA EULALIA. Bautizada originalmente con el nombre de CARMEN FLORES, fue motorizada en 1930 y rebautizada como PUERTO DE PALMA, y más tarde CALA SANT VICENÇ. A partir de 1975, navegó con el nombre de SAYREMAR UNO, trabajando como barco auxiliar y realizando tareas relacionadas con los trabajos submarinos. En 1997, el MUSEU MARÍTIM DE BARCELONA adquirió el SANTA EULALIA en subasta y lo restauró con su aspecto original de velero de tres palos. El pailebote volvió a navegar y a realizar actividades varias como buque insignia del museo y de la ciudad. Actualmente es una pieza fundamental en todo tipo de programas educativos y actividades pedagógicas y ciudadanas relacionadas con nuestro mar. El 25 de mayo de 2010 la Direcció General del Patrimoni Cultural de la Generalitat de Catalunya lo declaró Bien Cultural de Interés Nacional.

SANTA MARÍA: Un modelo de la nave que capitaneó la primera expedición de D. Cristóbal Colón que, el 12 de octubre de 1492, llegó a las costas americanas, es la nave SANTA MARÍA. Fue fabricado en el taller del MUSEU MARÍTIM DE BARCELONA en 1964 por D. Josep Giralt. Como se trataba de una embarcación más grande y sólida que la carabela, se convirtió en el buque mercante clásico de la época de los descubrimientos. Las naves arbolaban tres palos, trinquete y mayor con vela cuadra, y mesana con vela latina. La embarcación original era propiedad del piloto D. Juan de la Costa y fue construida en la costa cantábrica, motivo por el cual originalmente se la llamaba LA GALLEGA. La SANTA MARÍA naufragó en la costa norte de La Española (isla de Haití), la madrugada del 24 al 25 de diciembre de 1492. Con sus restos se edificó un pequeño enclave, el fuerte Natividad.

GALERA REAL: Una réplica a tamaño natural de la GALERA REAL realizada “in situ” por artesanos de los Astilleros Cardona, y decorada por D. Gabriel Alabert y D.  Francisco Ribera, asesorados por el personal técnico del Museu Marítim de Barcelona. La embarcación original, tenía una eslora de 60 m, una manga de 6,20 m y un puntal de 2,08 m, y estaba propulsada por 59 remos y la fuerza de 236 remeros. Además, arbolaba palo mayor y trinquete con velas latinas. La GALERA REAL, buque insignia de la Liga Santa que venció a los otomanos en Lepanto, en la costa griega, el 7 de octubre de 1571, fue construida en las Reales Atarazanas de Barcelona en 1568 para formar parte de una gran flota que debía enfrontarse a los otomanos. El 15 de enero de 1568, el virrey de Catalunya recibió la orden de que en Barcelona “se hiciera edificar esta GALERA REAL, de la mejor madera que por esas partes se hallase, por ser el pino de Cataluña el mejor leñamen que en Ásia, África y Europa se halla”. La decoración, basada en la iconografía clásica muy típica del Renacimiento, se hizo en Sevilla.

El acceso del público a los servicios de biblioteca, archivo y registro del Museo, se realizan mediante concertación de cita previa a informacio@mmb.cat. Los sábados, domingos y festivos, para cualquier consulta sobre visitas, compra de entradas y horario de gratuidad al Museo, contactad directamente al teléfono 93-342-99-20. Horario del MUSEU MARÍTIM DE BARCELONA, siempre con las Medidas Sanitarias por la COVID-19, es el siguiente:

DOS DE LAS MAQUETAS EXPUESTAS EN EL MUSEO

De lunes a domingo de 10 a 19 h. (acceso hasta las 18 h).
Domingos a partir de las 15 h, entrada gratuita.
El museo cierra los días 25 y 26 de diciembre, y 1 y 6 de enero.
Los días 24 y 31 de diciembre el museo cierra a las 15 h.

AVISO: la compra de entradas hay que realizarla físicamente, en las taquillas del Museo y las Tarifas: Entrada AL MUSEU MARÍTIM DE BARCELONA y al PAILEBOTE “SANTA EULALIA”: 10 € (General), 5 € (Reducida) y 8 € (Grupos), Solo el acceso al PAILEBOTE: 3 €, 1 € y 1 € respectivamente. La entrada a las Exposiciones del vestíbulo y al Espacio Mirador es gratuita.

INTERIORES DEL "MUSEU MARÍTIM DE BARCELONA"

Nota de Santa Cruz de Tenerife, mi Puerto.- La mayoría de las fotografías son propias de una visita al  MUSEU MARÍTIM DE BARCELONA, el 29 de abril de 2016. También hace unos días, el pasado 9 de enero de 2021, a través de un amigo del Museo, D. Manuel García García, donamos, sin ninguna contraprestación al Consorci de les Drassanes de Barcelona, a través de Dª Elvira Mata i Enrich, Directora General del Consorci de les Drassanes Reials i Museu Marítim de Barcelona, las siguientes fotografías:

DOS DE LAS FOTOGRAFÍAS DONADAS, EL "SV VEGA" Y EL "B.E. GUNILLA"

• 6 fotografías del portacontenedores SV VEGA en el puerto de Granadilla Santa Cruz de Tenerife.
• 6 fotografías del barco escuela GUNILLA en Muelle central de la dársena de Los Llanos de Santa Cruz de Tenerife.
• Así como ofrecer desinteresadamente, todas aquellas que desee el Consorci de les Drassanes de Barcelona i Museu Marítim de Barcelona, publicadas en su página web santacruzmipuerto.com, por lo que nos sentimos orgullosos de haber aportado con este pequeño grano de arena en el magnífico MUSEU MARÍTIM DE BARCELONA.

VISITA AL MUSEU MARÍTIM DE BARCELONA

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