EL BUQUE MULTIPROPOSITO “MPV EVEREST” (IMO 9769130) EN EL PUERTO DE SANTA CRUZ DE TENERIFE: Procedente del puerto de Las Palmas de Gran Canaria, ha quedado atracado en la dársena del Este poco después de las 15:15 horas, teniendo previsto zarpar mañana, según la web de la Autoridad Portuaria de Tenerife, pero sin determinar destino.

Se trata de un buque multipropósito diseñado para navegar por los Polos (Clase hielo 1A Super), construido en 2017 en los astilleros Keppel Singmarine, de Singapur, con n.º de grada 389. Navega con bandera de Bahamas y su indicativo de llamada es C6CZ6, siendo sus principales características: 21.943 TRB., eslora de 145,00 m., manga de 30,00 m., calado de 8,20 m. y velocidad de servicio de 12,0 nudos, pudiendo alcanzar una máxima de 15,0 nudos.

EL “MPV EVEREST”, FUE CONSTRUIDO EN SINGAPUR, EN EL AÑO 2017, TIENE 21.943 TRB

El 5 de abril de 2021, cuando se dirigía desde la Antártida al puerto australiano de Hobart, llevando a bordo 37 tripulantes y 72 miembros de la División Antártica Australiana, sufrió un incendio en la sala de máquinas de babor, que pudo ser sofocado con los propios medios del buque, sin que nadie resultara herido.

Gran parte de la mencionada sala de máquinas, sufrió considerables daños, teniendo que seguir el barco navegando con sólo dos de sus seis generadores diésel, lo que originó que tuviera que efectuar varias paradas en alta mar para llevar a cabo diferentes reparaciones, ya que se encontraban a una considerable distancia de cualquier ayuda externa.

Tras ocho días en estas condiciones, pudo llegar al puerto de Fremantle (Australia). Según el informe de la ATSB (Australian Transport Safety Bureau), el accidente se produjo por diversas causas: fallos técnicos, características del sistema de automatización integrado del buque, prácticas de guardias inadecuadas, fatiga de la tripulación y el propio diseño del buque, todo lo cual contribuyó a que se derramara fueloil en la mencionada sala de máquinas y su ignición, bien por contacto con la superficie caliente o por alguna descarga electrostática.

Fotos: Julio A. Rodríguez Hermosilla