Manuel García García –Navalista

Como todos los “barcos” que pinto, este también tiene su “Pequeña Historia”. En esta ocasión, nadie me lo ha indicado o pedido. Simplemente, me gustó el motivo, desde que hace 8 años vi una vieja foto del “PELÍCANO” amarrado en el Guadalquivir, con la proa hacia Triana, y el costado de estribor hacia Puente de Isabel II (o de “Triana” 1845-52), reproducida en la página 234 del libro  “Buques de la Armada Española a través de la Fotografía” de Agustín Rodriguez y Juan L. Coello. (Agualarga 2001). De hecho, en una visita a Sevilla en Noviembre de 2007, fui expresamente a tomar varias fotos desde el lugar exacto donde se había hecho la vieja foto, (hacia 1876)... para ver colores del cielo, sombras, agua, etc. Comparando una y otra, se observan varias diferencias motivadas por la reforma de 1977 cuando los arcos dejaron de tener carácter estructural: Se eliminó la estructura de hierro que hay sobre los aros, así como la barandilla, las parejas de farolas y su base. En su lugar se colocó un nuevo pavimento, barandilla y farolas de una columna y 3 brazos...Como es lógico, el fondo está totalmente cambiado tras la Expo de 1992.

Aunque básicamente, es casi exacto a la foto, he introducido algunas modificaciones, pues siempre me gusta “darle un toque personal”: Las personas que hay sobre el puente, las he pintado casi como están en la vieja foto: todas mirando o saludando al cañonero... aunque he añadido algunas, andando en los extremos, un par de golondrinas en vuelo, y la Carreta tirada por mulas de un arriero o “Cosario”, hacia Sevilla. En cuanto al “PELÍCANO”, que en la foto tiene un solitario marinero en el puente – que he ascendido a Oficial –, sin armamento visible, y la chimenea sin humo, le he añadido el cañón de 12 cm. a proa y la ametralladora en popa, humo en la chimenea, así como 6 marineros ( 2 en proa saludando...) y 3 oficiales, dando la sensación de que se están preparando para zarpar, o acaban de llegar. Lo dejo a la imaginación de cada uno. Ni que decir tiene que he consultado y mirado con lupa los datos y fotos del citado libro de Rodríguez y Coello, para intentar “ver” lo que las sombras me ocultaban. Me ha parecido ver una letras en el negro casco hacia popa, y pesando que fuera el nombre del Cañonero, he colocado un rotulo que indica “PELÍCANO”. Espero haber acertado. También he añadido el ancla de proa, poco visible en la foto.

Algunos datos sobre el “CAÑONERO PELÍCANO”: Mas por dar trabajo a la numerosa maestranza de Arsenales, que por un programa naval concreto, el 29-8-1870 se autoriza  la construcción de 3 Cañoneros de vapor y casco de madera, para ser usados como Guardacostas. Se le bautizo con nombre de reptiles. El 1-10-1870, en el Arsenal de La Carraca (Cádiz), se pone la quilla del entonces llamado “CAIMÁN”, aunque pronto se le cambia el nombre por PELÍCANO. Botado el 3-5-71, se entrega en Julio de 1875, aunque un par de años antes se artilló a toda prisa durante la rebelión Cantonal para la defensa del Arsenal. Desplazaba 245 Tn., con 34'40 mts. de eslora, 6'40 mts. de manga, 2'48 de puntal y 2'40 de calado medio. La propulsión la daba una máquina de doble expansión y 50 Cv. nominales, construida en Sevilla por la firma “Portilla, White y Cía.”, que impulsaba 2 hélices, dando 8 nudos. Podía estibar 24 Tn. de carbón, suficientes para navegar 900 millas a velocidad económica. Su aparejo auxiliar sumaba 304 m2 de superficie velica. La dotación era de entre 44 y 50 hombres.

Al principio estuvo armado con un cañón rayado de 16 cm sistema Palliser a proa y uno de bronce rayado de 8 cm a popa. En 1886, se cambia el armamento por un cañón “Hontoria” de 120 mm. mod. 1879 y una ametralladora Nordenfelt de 11 mm. Destinado a Cádiz, era frecuente su presencia en Sevilla y nos lo imaginamos pasando lento frente a Coria del Río, recibiendo el saludo de los pescadores de “arbures”  y dejando tras sí una oscura columna de humo. Por el armamento y la uniformidad de la marinería, la foto se puede situar en el verano de 1886. Hacia 1890 fue enviado a Guinea Ecuatorial, junto con su gemelo “SALAMANDRA”. El clima tropical y la falta de mantenimiento adecuado (ambos reparaban en la cercana colonia alemana de Camerún), aceleraron se declive, causando ambos baja el 14-08-1898, con los cascos completa-mente podridos. El “PELÍCANO” aún fue usado unos meses como “pontón” en el Puerto de Santa Isabel de Fernando Poo, hasta que se fue a pique la noche del 9 a 10 de Enero de 1900. Y esta es la breve reseña sobre ésta modesta unidad de la Armada Española. Sirva mi acuarela como homenaje y reconocimiento a aquellos marinos que sirvieron en ésta y otras unidades, con las incomodidades y problemas de época. Barcelona-24-Enero-2010.

REVISTA GENERAL DE MARINA, EN SU PÁGINA 764 PUBLICA SOBRE LA PINTURA:

Cañonero Pelícano. Reproducción de una fotografía del libro Buques de la Armada española a través de la fotografía, Agualarga 2001. (Manuel García García).