Llegó el pasado fin de semana a la dársena de Los Llanos, procedente del puerto de Mogán (Gran Canaria), el velero ATYLA, con código MMSI: 577192000, construido a mano por Vicente Esteban, en Vinuesa-Soria, Lekeitio-Vizcaya y Bilbao-Vizcaya (todos en España), entre los años 1980-1984. Tiene un tamaño de 22 x 7 m, siendo su calado de 3,5 m. Propulsión: (2) x motores diésel AU5.000, de 4 cilindros y 220 CV a 1.000 rpm, que ayudado de 400 metros cuadrados de superficie vélica, le mantiene a una velocidad media de 5,3 knots, llegando a alcanzar los 12,7 nudos y 655 toneladas de registro bruto. Navega bajo bandera de Vanuatu (VU) y su identificativo de llamada es YJTM7.

El pasado viernes, tuve la oportunidad de visitar el buque velero, la goleta de proa con aparejos, de dos mástiles “ATYLA”, siendo la guía, una joven pero veterana tripulante del barco, Kasia; también recibí algunas informaciones por parte de Eric. Es un Barco Escuela Internacional (para aprender a navegar), espacioso y construido totalmente en madera noble, siguiendo un diseño original inspirado en las goletas del siglo XIX ,combinando un aspecto tradicional con instalaciones modernas, creando un ambiente agradable y acogedor, y parece sacado de una película de piratas. Partirá hoy lunes con toda probabilidad, con destino a las Azores, una vez realizada la parada técnica de avituallamiento y repostaje; también alguna visita a la isla.

DOS EXTERIORES DEL ATYLA, ACOMPAÑADO DE LA ENCANTADORA GUÍA "KAISA"

Tiene el ATYLA una tripulación entre 5 y 7 personas, pudiendo acomodar en su interior, hasta 24 personas, alojadas en 4 camarotes con literas. Cada litera tiene una gruesa cortina que la separa de la habitación, creando un espacio de privacidad para dormir, diseñada para sentirse casi, como en casa mientras se navega. También pueden viajar 80 personas en cubierta, para las salidas costeras diarias. A cada persona a bordo se le asignan 2 pequeños armarios para guardar sus pertenencias y para embarcar, no se necesita traer el saco de dormir, puesto que a bordo hay sábanas, mantas y almohadas, y si se desea, dispone también de hamacas. Las fotos son propias del pasado viernes día 24 de septiembre.

Comer es una actividad social, y a bordo del ATYLA se hace con todos juntos: “En mi visita, estaban preparando una paella”. Las comidas se sirven en el amplio salón, y cuando el tiempo es bueno tiempo, en cubierta con vistas al mar. La cocina de este velero, está completamente equipada para la preparación de comida a bordo, (3 deliciosas comidas al día). Existe un cocinero profesional que planifica y crea los menús saludables. Hay un refrigerador grande y un arcón congelador para almacenar cualquier comida “especial”, que por necesidad, se tenga que traer. Los aprendices - futuros marineros, pueden compartir con el resto de la tripulación, su cultura culinaria, preparando platos especiales de su país o región.

DOS FOTOS DE INTERIORES, EL PUENTE Y UNO DE LOS BAÑOS

El ATYLA, lanzado el 15 de mayo de 1984 por D. Vicente Esteban, que ganó el Trofeo de la Amistad en su segunda regata de veleros en el año 2014, tiene 5 baños y 3 duchas a bordo, equipadas con agua caliente. También existe una lavadora para poder lavar ropa y toallas. En el año 2016, se inició el registro de la FUNDACIÓN ATYLA, una organización sin ánimo de lucro que actualmente opera el barco, u organiza viajes de aventura y coaching para gente de diferentes países, edades y clases sociales. Su puerto base lo tiene en la Ría de Bilbao, junto al Museo Marítimo, donde Santa Cruz de Tenerife, mi Puerto, se ha comprometido en participar en alguna actividad del Museo, de donde somos socios.

Estuve leyendo el libro del barco, donde consta su construcción, actividades, las diferentes travesías y me llamaron la atención dos notas, una que decía “Buscamos árboles en diferentes bosques, que tuvieran la forma apropiada para las cuadernas del barco. Siguiendo las antiguas tradiciones, talamos los árboles en la época adecuada del año y lo que es más importante, durante la Luna Nueva”. Y también decía: “Los troncos sacados al camino, eran cargados en camiones que los trasladarían al aserradero para la obtención de diferentes piezas”.

EL "LIBRO DEL BARCO", ALGUNAS RUTAS E INFORMACIÓN VARIA DEL "ATYLA"